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Remdesivir: Millonarios gracias a la desgracia ajena

Tras mantenerse en la expectativa durante meses acerca de la conveniencia o no de este medicamento para tratar a los enfermos de COVID-19, al final, la Agencia Europea del Medicamento (EMA), ha aprobado este fármaco para el tratamiento de la enfermedad.

Aunque Remdesivir se creó hace ya una década, destinado a los pacientes de la última crisis del ébola. Este antiviral, ha pasado por diversos ensayos clínicos hasta demostrar que es eficaz, no en la curación del COVID-19, no; no es una vacuna, pero sí que puede mejorar y acortar el tiempo de recuperación de pacientes de Coronavirus.

Es el primer fármaco aprobado por la EMA para tratar el COVID-19.

Y ahora las malas noticias

Este medicamento lo comercializa la farmacéutica Gilead y ya ha puesto precio de venta: unos 340 euros por cada vial. Teniendo en cuenta que el tratamiento establecido para esta enfermedad son seis dosis, estamos hablando de un coste de más de 2.000 euros por paciente.

La multinacional está barajando un distinto precio de venta a países subdesarrollados, pero al parecer, al resto de países va a establecer un precio único que (con sus más o menos), van a tener que pagar sí o sí.

Hagamos cuentas

Si a fecha de hoy existen casi diez millones y medio de contagiados, nos salen unas cifras astronómicas en ventas de este producto. De hecho, una noticia de hoy mismo asegura que EEUU ha comprado prácticamente las existencias de tres meses de este fármaco… Vaya, que ha dejado desabastecidos de este medicamento durante una temporada a otros países.

Según diversas estimaciones que hemos recogido a través de la prensa fabricar una dosis de Remdesivir tiene un coste de ¡¡¡ CINCO EUROS !!!

Negocio redondo a costa de los demás

Si esto es así, si el coste de fabricar Remdesivir es de 5 euros, multiplicar por SETENTA para su venta el coste de este medicamento, es totalmente desporporcionado, abusivo, injusto e incluso probablemente ilegal.

Esto no es hacer el “Agosto” es imponer tiránicamente precio y producto en exclusividad teniendo además la desfachatez la empresa de asegurar que aún debería ser más caro ya que acorta costes en los Hospitales.

El fín de los medicamentos es curar. El fín de las farmacéuticas NO es curar, son los beneficios, aunque sea a costa de dejar morir a aquellos que no puedan pagar los fármacos que venden.

Algunas farmacéuticas tratan con verdadero desdén al enfermo, al ser humano. Lo primero que se debería buscar es regular y medir esos beneficios empresariales, así como garantizar el acceso al tratamiento farmacéutico por parte de cualquier persona.

Coronavirus COVID-19

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