La 5ª Ola
La 5ª ola del Coronavirus
Entramos de lleno en la 5ª Ola. Los datos de ayer nos indicaban que actualmente, casi 4500 personas se encuentran hospitalizadas por COVID-19. De ellas, unas 800 se encuentran en UCI. A pesar de que la vacunación avanza a muy buen ritmo, la incidencia acumulada en nuestro país supera los 470 casos por cada 100.000 habitantes, ya que se han notificado casi 150.000 nuevos contagios en lo que va de semana.
(Ver la situación actualizada. Ministerio de Sanidad: Pinchar AQUÍ)
La ola joven
A pesar de que el nuevo aumento de casos positivos se ha iniciado entre los más jóvenes (la franja de edad menos vacunada), con el paso de los días, los nuevos casos se están detectando entre personas de mayor edad. De hecho, uno de cada tres fallecimientos en lo que va de este mes, pertenecen al grupo de entre 50 a 69 años, un grupo de gran riesgo al no hallarse totalmente vacunado.
Jóvenes en un concierto
Las irresponsabilidades en la actuación frente a la pandemia nos devuelven a las restricciones de movilidad. Algo que ya parecía del pasado al inicio del verano, por y a pesar de las muchas voces que nos indicaban mantener el nivel de prudencia.
No, la pandemia no es cosa del pasado
La interacción sin medidas de seguridad entre el grupo más joven ha generado este aumento desmedido de contagios, en un momento en el que se auguraba un mayor retroceso de la pandemia y que parecía que podíamos ir recuperando poco a poco la normalidad. Pero esa normalidad había, debería haber estado presente con prudencia… y eso no se ha dado. Se han disparado los contagios y por ende, aumentan también entre las personas con más riesgos de sufrir consecuencias más graves por la COVID-19.
Desgraciadamente no podemos descifrar qué es lo qué ha pasado, si ha sido solo por la irresponsabilidad de un sector más joven de la población o si las Administraciones podrían haber realizado algún plan para evitar este aumento de casos que se intuía con claridad que se iba a dar.
Vacuna Covid-19
Vacunas, vacunas y vacunas
Y conciencia social, tanto de gobernantes como de la población en general es lo que se necesita. Sería muy positivo que cada uno de nosotros reflexionáramos acerca de cuál sería nuestra actitud si un familiar nuestro se hallara en grave riesgo de muerte por la COVID-19. A buen seguro tomaríamos muchas más medidas de precaución para evitar cualquier contagio.
Coronavirus COVID-19